La Policía de Córdoba detuvo en las últimas horas al onceavo imputado en la causa de las estafas de «terapia ancestral egipcia». El equipo judicial que investiga el caso está convencido de que este último detenido es el cabecilla del grupo.
La persona en cuestión es Álvaro Juan Aparicio Díaz, quien se hacía llamar «Licenciado Sahú Ari Merek».
Bajo este nombre supuestamente originario de Medio Oriente, el hombre integraba el grupo de «sanadores» que realizaban la terapia «Seshen», cuya práctica está prohibida por el Colegio de Psicólogos de Córdoba.
La realización de estas terapias está desaconsejada, debido a que su eficacia no se puede comprobar.
Hasta ahora, en la causa que investiga la fiscal Analía Gallaratto ya hay 11 detenidos, todos imputados bajo la caratula de Asociación ilícita, estafas reiterdas y ejercicio ilegal de la psicología.
Este último cargo se origina tras una denuncia del Colegio de Psicólogos provincial, el cual había recibido quejas de varias personas que afirmaron haberse sentido estafadas luego de tratarse bajo estas «técnicas ancestrales».
Adicionalmente, a Díaz se le suma la comisión del delito de Abuso sexual reiterado.