A un par de meses del 22° aniversario del paso a la inmortalidad del «Potro» Rodrigo, surgió una versión sobre su fallecimiento que revolucionaría a Córdoba, en caso de ser cierto.
De acuerdo a un ex directivo de Magenta Discos, Pablo Ceccarelli, el artista cuartetero habría sido asesinado.
Según su testimonio, los responsables del asesinato serían los dueños de la discográfica, Alberto y Jorge Kirovsky.
Dichas declaraciones fueron dadas por Ceccarelli en Los Ángeles de la Mañana, y al ser preguntado sobre el móvil del crimen, comentó que existían varias tensiones previas entre el representante de Rodrigo, José Luis «Pepe» Gonzálo, y los hermanos Kirovsky.
Luego de que saliera A 2000, Rodrigo se había negado a grabar un disco nuevo, por lo que -según el ex directivo- los hermanos habrían ordenado su asesinato para poder sacar nuevo material discográfico y así obtener mayores ganancias.
Ceccarelli mencionó que «Magenta vendió 10 millones de copias» en los próximos 30 días tras la muerte del astro cuartetero.
Asimismo, señaló (como prueba de los hechos) un correo electrónico que recibió por parte de un comisario de Berazategui donde se confirmaba la patente del vehículo que protagonizó el trágico accidente de tránsito en la autopista Buenos Aires – La Plata. El ex CEO aseguró que dicho correo fue enviado a su casilla por error y que el mismo comprobaría que se trató de un asesinato.
