El Gobierno Nacional, en conjunto con el Gobierno de Salta, colocarán un cerco fronterizo en la localidad de Aguas Blancas, a los fines de fortalecer las medidas de vigilancia del paso con Bolivia.
La medida responde al Plan Güemes, una iniciativa del Ministerio de Seguridad de la Nación para fortalecer las fronteras del norte y evitar la inmigración ilegal al país.
Desde el Ministerio precisaron que si bien del lado boliviano había controles estrictos, «del lado argentino no había una delimitación clara». Así lo comentó Virginia Cornejo, directora de Vigilancia y Control de Fronteras al diario El Tribuno.
El alambrado tendrá una extensión de 200 metros, y se colocará entre la terminal de colectivos y la oficina de migraciones. Asimismo, se desplegaron fuerzas federales para reforzar el control de la zona, a los fines de asegurar el paso obligatorio por la oficina migratoria.
Dicho cerco se colocará dentro del murallón preventivo que se utiliza para contener la creciente del Río Bermejo, y contará con financiación del Gobierno Provincial. A tales fines, el Ejecutivo ya convocó a la licitación.
