árbol

Existe un árbol que tiene la capacidad de producir quemaduras y ampollas que pueden provocar la muerte de una persona.

El Hippomane mancinella es un árbol endémico del Caribe conocido por el poderoso efecto nocivo que provoca.

El árbol de la muerte posé un tronco de color gris que puede llegar a crecer hasta 20 metros de largo.

Produce frutos pequeños parecidos a las manzanas que pueden engañar a quienes desconocen su potencial peligro.

Por la forma de sus frutos, suele conocerse también como «manzanillo de playa» y «manzanillo de la muerte».

Aunque suele desplomarse por el peso de su porte, tiene la capacidad de sobrevivir de manera rastrera.

De sus ramas crecen flores grandes y una savia lechosa venenosa emana del tronco, principalmente en los días de lluvia.

De acuerdo a los registros prehispánicos, las culturas mesoamericanos utilizaban este árbol como instrumento de tortura.

En los días de lluvia, las víctimas amarradas al tronco se retorcían por el dolor que les producía el ácido que emanaba la planta.

El ardor y la inflamación que producen las quemaduras en los tejidos es horrible y en ocasiones puede ser mortal.

Su poder corrosivo es tal que puede traspasar las telas de algodón y de muchos otros géneros.

Para quienes consumen sus frutos, el daño en el tracto digestivo es agresivo por lo que requiere atención médica.

Dada su potencial peligrosidad, conviene evitar el consumo de sus frutos y alejarse de su sombra.