¿Alguna vez te has puesto a pensar que los olores que percibimos guardan un significado especial que podemos descubrir?
En los olores que percibimos existen secretos que nos anticipan, en ocasiones, hechos relevantes.
Los seres humanos percibimos olores desde el momento mismo en que nacemos.
A través del olfato, las personas podemos interactuar con el medio que nos rodea.
En los olores podemos encontrar la clave para relajarnos o para liberar el estrés que acumulamos.
Cuando estamos enamorados, el cuerpo libera sustancias químicas llamadas feromonas que funcionan como perfume sexual.
Es común que olores como el café, la tierra mojada o del pan recién horneado nos reconforten. Cuando los percibimos, nuestro cerebro se transporta hacia la infancia.
Técnicas como la aromaterapia recurren al fichero emocional que se activa en la mente con cada esencia.
Percibir el bosque, el mar, el viento o el frío es posible también con el olfato.
Todo es susceptible de olor ya que los recuerdos adhieren perfume al contexto.
Pero qué ocurre cuando de manera abrupta percibimos olores que no están a nuestro alrededor.
Para estos casos, la parapsicología explica los significados.
Olores y sus significados
Tabaco: alguien te extraña
Dulce: embarazo en puerta
Hueso: enfermedad de alguien conocido
Rosas: regalo inesperado
Azahares: boda en camino
Sudor: deseo sexual
Humedad: posible enfermedad
Perfime: buena suerte
Papel: riqueza, fama
Polvora: decisión díficil de tomar
Sangre: peligro
Agua: creatividad, fertilidad
