Abel Lucio Dupuy, un nene de 5 años, murió en La Pampa producto de los golpes propinados por su propia madre este fin de semana.
La autopsia realizada al cuerpo del menor confirmó que la víctima murió a consecuencia de los politraumatismos.
También se encontró evidencia de golpes y lesiones que el menor recibió a lo largo de su vida.
El cuerpo presentaba quemaduras con cigarrillo, malos tratos y golpes con objetos contundentes.
Por el hecho, tanto la madre como la novia quedaron detenidas y fueron trasladadas a la comisaría.
Al lugar se presentaron familiares y conocidos de la víctima que exigieron justicia y ocasionaron disturbios.
Durante la protesta, el edificio de la comisaría de La Pampa fue apedreado y los patrulleros incendiados.
Los hechos ocurrieron el domingo a la tarde mientras los familiares de la víctima adjudicaban la violencia a personas infiltradas.
Tanto los vecinos de Lucio como sus familiares paternos confirman la ferocidad con la que la madre lo trataba.
Dentro de las evidencias se encuentran los pedidos de auxilio que realizó una vecina en agosto pasado.
En esa ocasión, la vecina solicitó una ambulancia tras escuchar la golpiza que le propinaba la madre a Lucio.
Christian Dupuy, padre de Lucio, asegura que la justicia se inclinó siempre hacia la madre sin escucharlo.
Magdalena Espósito Valenti, madre de Lucio, quedó imputada por «homicidio calificado por el vínculo».
Mientras que Abigail Pérez, novia de Magdalena, está acusada por «homicidio simple».