Los últimos sondeos en las elecciones de Estados Unidos muestran una clara división de género entre los latinos respecto al voto.
De acuerdo a recientes encuestas, 3 de cada 10 latinos eligen a Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
Respecto al género, la cifra de hombres que optan por él supera al de las mujeres.
Contrario a lo que se piensa, no es solamente la brecha etaria la que marca la brecha en la preferencia de voto.
También existe una división respecto al género que elige a los candidatos.
Aún cuando se considera que los discursos del candidato Trump racistas en extremo, un sector de las minorías lo eligen con los ojos cerrados.
En el caso particular de la comunidad latina, tenemos el claro ejemplo de los inmigrantes mexicanos.
La población mexicana en Estados Unidos conforma un núcleo razonable de votos.
Los candidatos a Presidente en ese país son conscientes de ello y es por eso que las campañas electorales suelen incluir promesas esperanzadoras.
Y es ahí donde se arraiga la verdadera razón que motiva a un inmigrante a votar a quien lo rechaza de manera abierta.
La plataforma de Trump incluye ofertas de trabajo y el sueño de la «América fuerte».
Ambos aspectos son apreciados por el género masculino mexicano, acostumbrado a las figuras paternas inmutables.
En el caso de las mujeres latinas, la situación es claramente distinta.
La distancia que las divide de los hombres se observa en los sondeos.
De acuerdo a la encuestadora PEW, el 67% de las hispanas votan a Biden.
Habrá que esperar no solamente el resultado de las elecciones sino también la puesta en marcha del programa de gobierno del ganador.
Es ahí entonces cuando veremos si las promesas se convierten en realidades.