La explosión de casos y los brotes de la variante Ómicron en Córdoba, aparte de causar estragos en materia sanitaria, también generaron varios inconvenientes en materia laboral y por consiguiente económica.
El Coronavirus, si algo nos ha enseñado es que no discrimina entre ricos y pobres, o entre sector público y privado. Tal fue el caso del servicio de recolección de residuos en la capital cordobesa, donde se registraron demoras a raíz del contagio y/o aislamiento de los trabajadores de varias empresas.
Algo similar ocurrió hace unas semanas en los bancos, y en estos días le tocó a distintos negocios de la ciudad.
Con el paso de los días y con el aumento de casos, varios locales empezaron a tener carteles anunciando cierres hasta determinadas fechas, ya sea por aislamiento preventivo o -peor aún- por contagios de Covid-19.
Sobre este tema, la Federación de Comercios de la Provincia (FEDECOM) brindó algunas certezas sobre este problema. En diálogo con Radio Universidad, la secretaria general Cecilia Pérez Contreras remarcó que el ausentismo en los negocios cordobeses llega hasta un 50%.
En este contexto, son muchos los locales que no pueden abrir sus puertas ante la falta de personal sano, o que tienen que invertir más dinero en contratar personal que reemplace de forma temporal a los contagiados y contactos estrechos.
En ese sentido, Pérez Contreras pidió que se acelere la llegada, implementación y comercialización de los autotest Covid, los cuales podrían reducir los niveles de ausentismo y evitar caídas mayores de ventas.
