Hoy vence el plazo de del DNU para contener la suba de contagios por lo que se espera el detalle de las nuevas restricciones.
Un nuevo Decreto de Necesidad y Urgencia empezará a regir a partir de las 0 horas del día sábado.
El Presidente de la Nación, Alberto Fernández, anunció la continuidad de las medidas de aislamiento hasta el 21 de mayo. Frente a la segunda ola de contagios, el Gobierno Nacional dispuso la suspensión de clases presenciales y la extensión de las restricciones al tránsito de personas.
En Argentina, la segunda ola de contagios está en pleno ascenso. Las estadísticas indican un escalada exponencial de contagios. Algunos de los puntos neurálgicos de la cuestión es encontrar la forma de reducir la circulación de personas sin afectar la economía.
Se trata de una batalla sin precedentes en la que habrá que acordar criterios entre distintos grupos.
Por un lado se encuentra quienes defienden la presencialidad y la «libertad» para circular. Mientras que por el otro están quienes afirman que la única forma de cortar el virus es el confinamiento severo de personas.
En medio de esas dos posturas se encuentra la economía que se cae a pedazos y un sistema de salud que no resiste la embestida, especialmente en Buenos Aires.
Cabe destacar que si bien las medidas tienen un alcance nacional, cada gobernador podrá disponer de su aplicación en su respectiva provincia.
Entretanto, los médicos anticiparon el agotamiento físico y mental que les produce atender a los infectados. También se escucharon reclamos de los comerciantes que fueron golpeados económicamente por la pandemia.
Para todos esos agentes, la situación se agudiza. La segunda ola exige medidas extremas.
Incluso antes del anuncio de las medidas, desde algunos medios de comunicación ya anticiparon que se espera el cierre comercial de grandes superficies.
Se espera también que se reduzca la circulación en el transporte público y se definan las tareas esenciales.