Durante la jornada del martes, la Justicia imputó a un efectivo de la Policía de Córdoba por disparar a una adolescente en el ojo durante un operativo en Barrio Zepa.
El incidente ocurrió el 8 de junio, en medio de una situación entre los vecinos y los uniformados donde estos últimos hicieron uso de la fuerza. Cabe destacar que las circunstancias bajo las cuales se dio tal hecho están bajo investigación, pero lo cierto es que la joven, de 17 años de edad, fue alcanzada por un balín de gas pimienta.
La herida generada por el proyectil le generó la pérdida de la visión en uno de sus ojos. De acuerdo al personal médico que la intervino, el daño resultó irreversible. Fue tras ese diagnóstico que el fiscal Andrés Godoy imputó al uniformado que efectuó el disparo.
Un detalle no menor es que el hecho se enmarca en el proceso de reubicación de los vecinos de las villas Miralta y El Platito hacia Barrio Zepa, donde se realizó un desalojo por parte de la fuerza policial.