Huevo

Un siberiano encontró en un placa de hielo una nueva forma de cocinar un huevo sin la ayuda de fuego o aceite.

Todos sabemos que se puede freír un huevo sobre un radiador, encima de cualquier placa caliente o al rayo del sol.

Pero qué pasa si el recipiente en cuestión es nada más y nada menos que una superficie de hielo.

Hasta donde sabemos, el frío se encuentra en un polo totalmente opuesto al calor.

En consecuencia, las características tanto de uno como del otro lado son opuestas.

Bueno, un siberiano saltó a las redes sociales para demostrar cuan equivocados estamos.

Por lo menos, su objetivo se cumple de forma cabal en apariencia.

En un video que publicó hace tiempo atrás en las redes sociales se puede observar su experimento.

La experiencia empezó al lado de un lago y con una pequeña placa de hielo y un huevo como protagonistas.

Existen distintas formas de cocinar un huevo pero en el podio de preferencias está el frito.

Siguiendo esa misma tendencia, un siberiano oriental logró un truco que te deja con la boca abierta.

Al lado del lago Baikal rompió un huevo sobre una placa y éste se congeló casi de manera inmediata.

La gracia del video está en que en el proceso de congelación, el huevo adquirió un aspecto de fritura.

Este huevo no tiene nada que envidiarle al cocinado en una sartén rebosante de aceite.