Desde la madrigada de este miércoles, los trabajadores de la empresa ERSA realizan un paro de transporte que afecta a varias líneas.
En reclamo por al reincorporación de un chofer cesanteado, los empleados de ERSA realizan un paro de transporte.
Con quema de cubiertas y la presencia de 30 trabajadores, el paro parcial de transporte arrancó esta madrugada.
Los manifestantes se apostaron en el acceso a la planta en el Camino a San Carlos para realizar la asamblea correspondiente e impedir la los coches.
El objetivo de la medida de fuerza es lograr la incorporación de los choferes despedido. Se trata de Federico González, un trabajador que fue cesanteado en 2019. Este caso se elevó a la justicia y tras un fallo debería ser reincorporado a la empresa.
Son al menos cinco las líneas afectadas por al medida y que se corresponden a los corredores 20, 40, 50, 70 y 600 respectivamente.
Con la protesta, cientos de empleados, estudiantes y ciudadanos de a pie se quedan sin opción para llegar a destino.
Cabe destacar que el reclamo no cuenta con el apoyo de UTA (Unión Tranviaria Automotor) sino del gremio de la CTAA.
Sobre la protesta, el secretario General de CTAA de la Provincia de Córdoba, Federico Giuliani, declaró:
«Estamos aquí con el respaldo de la sentencia para reclamar la inmediata reinstalación del compañero González, en resguardo del cumplimiento de la decisión de la Justicia».
Desde el punto de vista del gremio, el despido de González por parte de la empresa es discriminatorio y obedece a su actividad sindical.
«Es un despido a todas luces discriminatorio porque la Sala Sexta de la Cámara del Trabajo de la Ciudad de Córdoba confirmó la condena de la empresa ERSA ordenándole reinstalar al compañero Fernando González en su puesto de trabajo, esto es en sus tareas de chofer. La ley salió en resguardo de por prohibir la libertad sindical, por combatir a los trabajadores que formamos un sindicato, que luchamos por nuestros derechos»
Según explica Giuliani, la Sala Sexta de la Cámara del Trabajo de la Ciudad de Córdoba falló de manera positiva en el caso de Fernando González. En ese sentido, la reincorporación del chofer a sus tareas debería cumplirse en tiempo y forma, tal como lo dicta la justicia.
Como respuesta, Ersa lanzó un comunicado en donde afirma desconocer el fundamento de la protesta:
«La empresa ERSA URBANO S.A. comunica que en el día de la fecha, siendo las 4.20hr, se encuentra con la total obstrucción en el ingreso/egreso en su predio de Camino San Carlos KM 4.5. Llevado a cabo por un grupo de 30 personas aprox sin identificación.
Este episodio, del cual desconocemos los fundamentos, está impidiendo cumplir con el servicio público de pasajeros ocasionando daños no sólo a la empresa sino que más importante aún al ciudadano».
Pese al comunicado de ERSA, la CTAA adelantó que el paro de transporte continuará por tiempo indefinido hasta que las voces de los manifestantes sean escuchadas.
Mientras la empresa y los trabajadores miden fuerzas, los usuarios del servicio pagan los platos rotos.
Otro de los condimentos que se suman al combo del conflicto son los cuestionamientos que los usuarios realizan respecto a las demoras en las frecuencias de los colectivos de la mencionada empresa.
El transporte urbano de Córdoba arrastra, desde hace mucho tiempo, falencias que no han podido solucionarse. Por un lado tenemos los reiterados conflictos entre las empresas y trabajadores que toman como rehenes a los usuarios mientras los gremios y los entes reguladores de transporte miran para otro lado. También debemos recordar la falta de correspondencia entre el precio del boleto y la calidad en la prestación del servicio.