Las autoridades de Turquía y Siria trabajan en las zonas devastadas por el terremoto en la búsqueda de personas sobrevivientes.
Tras el devastador terremoto ocurrido en Turquía y Siria, el drama en los lugares afectados continúa.
Un terremoto de 7,8 de magnitud sacudió el sureste de Turquía, límite con Siria, en la madrugada del lunes.
La intensidad del movimiento causó miles de muertos, cientos de personas desaparecidas y desolación a su paso.
De acuerdo a las cifras actualizadas, son 11.200 las personas fallecidas hasta el momento.
Los reportes indican que algunos de los sobrevivientes que permanecen sepultados bajo los escombros envían mensajes de ayuda.
Aunque el gobierno turco afirma estar haciendo lo necesario, los ciudadanos reclaman celeridad en las tareas.
Al drama que se observa en las imágenes se suman las bajas temperaturas y la falta de alimento.
Las tareas de rescate son lentas y las posibilidades de encontrar personas vivas disminuye con el correr de los días.
Desde México llegó un escuadrón especial de perros rescatistas que se sumarán a los operativos.
También se sumaron distintos países que donaron víveres, agua y material sanitario para asistir a los heridos.
Dentro de todo el horror de la tragedia, la recuperación de una beba recién nacida fue celebrada en el mundo entero.
Sobre la devastación, los expertos indican que la razón que explica lo sucedido es multifactorial.
Al margen de la intensidad del terremoto, los problemas de construcción y el tipo de movimiento crearon la tragedia.
