Para sorpresa de todos, las aguas de los canales de Venecia de vistieron de un color verde fluorescente intenso.
La policía de Venecia investiga la aparición de una mancha enorme que tiñó las aguas del canal más famoso del mundo.
Al mejor estilo Sprinfield, Venecia apareció en las tapas de todos los diarios por un hecho fuera de lo común.
En el trayecto que conecta Campo San Luca con el con el Gran Canal apareció una mancha verde.
De acuerdo a las investigaciones preliminares, una sustancia parecida a un trazador inundó las aguas del canal.
Se trata de un líquido que suele utilizarse para detectar fugas de agua y dentro de las cavernas.
La principal hipótesis apunta a la intervención de grupos ambientalistas como el causante del hecho.
Tras lo sucedido, las autoridades de Venecia convocaron a una reunión de urgencia e implementaron un operativo.
La idea es determinar las causas del episodio y evitar uno nuevo en la zona.
Personal de Bomberos, en combinación con la policía y la agencia ARPAV determinaron que el líquido no es tóxico.
El peculiar episodio trajo a la memoria lo sucedido en 1968. En ese entonces Nicolás García Uriburu, un argentino radicado en Venecia, arrojó una sustancia fluorescente al canal como protesta por la contaminación del agua.
También se recuerdan intervenciones similares realizadas por grupos ecologistas en lugares emblemáticos.
En todos los casos, el reclamo continúa siendo un llamado de atención sobre los daños que hacemos al medio ambiente.
