Un paciente de 92 años de edad al que la justicia autorizó el suministro de dióxido de cloro para tratar el coronavirus, falleció.
El hombre de 92 años edad cuya familia recurrió a la justicia para que lo trataran con dióxido de cloro, falleció ayer.
Óscar Jorge García Rúa es el nombre del fallecido que se encontraba internado en el Sanatorio Otamendi.
Al momento de la muerte, padecía coronavirus y se encontraba en grave estado de salud.
Dado que el Otamendi se negó a utilizar el dióxido de cloro, sustancia prohibida por el Anmat, la familia recurrió a la justicia.
Después del fallo positivo de un juez, la sustancia fue colocada en el paciente.
A partir de la muerte de Óscar, el abogado de la familia arremetió contra el sanatorio y amenaza con una demanda.
De acuerdo al letrado, el Otamendi demoró el tratamiento por lo que pretende iniciar acciones legales por homicidio culposo.
Para el abogado, la muerte de Óscar es producto del coronavirus que se agravó por falta del tratamiento.
También asegura que el Anmat desaconseja pero no prohíbe el uso del dióxido de cloro.
El tratamiento con dicha sustancia fue recomendada por un médico ajeno al Sanatorio Otamendi.
Al ser considerada como una sustancia prohibida, el sanatorio se negó a suministrarla.
Fue por eso que la familia tuvo que recurrir a la justicia.