De un tiempo a la fecha, la oferta de sal en los supermercados es enorme. Existen distintos tipos y hoy te contamos las propiedades de cada una de ellas.
Al igual que el azúcar, la sal es el condimento de la vida.
Sin ella es casi imposible imaginar el sabor de los alimentos.
Es importante saber que no es otra cosa que una molécula de cloro unida a una de sodio.
El porcentaje de la cantidad de cloruro de sodio, los agregados y el proceso de refinación son algunas de las características que las diferencian.
En el mercado existe una gran cantidad de productos que se ofrecen como alguna variedad.
Sin embargo, son cuatro los tipos.
Común
Llamada también sal de mesa; es la de mayor consumo por ser la que resulta del proceso industrializado del agua marina.
Suele contener elementos agregados como el ferrocianuro de sodio o de potasio que ayudan a eliminar la humedad del producto.
Marina
Conocida como sal de mar, compite en preferencia con la común y también se obtiene de la evaporación del agua de mar.
Es alta en yodo y contiene menor cantidad de potasio, magnesio, calcio y hierro.
Se encuentra en cristales gruesos con el fin de lidiar con la humedad a la que es susceptible.
Flor de sal
Se obtiene de los cristales que se forman en las lagunas de agua marina.
Cuenta con un bajo porcentaje de cloruro de sodio y alta en impurezas como el yodo.
Sal del Himalaya
De moda en el mundo entero y a la que se le atribuyen propiedades excepcionales.
Este tipo de cloruro de sodio se obtiene una mina, la segunda más grande del mundo, ubicada en Pakistan.
El color rosado lo obtiene gracias a las impurezas de metales como el hierro.
