La reciente viralización de la foto del festejo del cumpleaños de la primera dama Fabiola Yáñez en la Quinta de Olivos sumó otro capitulo más a la novela del Olivosgate.
En la imagen, que se habría filtrado del teléfono de la persona que la tomó, se ve a la primera dama y al Presidente Alberto Fernández, junto a otros conocidos de la pareja presidencial.
También estuvo Dylan, quien a juzgar por su cara, sabía la gravedad de los hechos.
Esta reunión social ocurrió a mediados del 2020, cuando el país estaba en la fase más dura de la cuarentena por la pandemia. Esto, por supuesto, generó toda clase de reacciones por parte de la sociedad y los actores políticos, particularmente de aquellos alineados a la oposición nacional.
Independientemente de las reacciones, la situación se trató de un claro ejemplo del «haz lo que yo digo pero no lo que hago».
Las disculpas de Cafiero
Luego de que el escándalo se hiciera sentir en las redes sociales, programas de noticias y de opinión, el Ejecutivo Nacional tuvo una respuesta que en cierto modo resulta racional, incluso teniendo en cuenta la actitud insensible de este particular evento en la Quinta Presidencial.
En diálogo con Radio 10, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, señaló los hechos como un «error que no debería haber pasado». Si bien la Quinta tuvo varias reuniones, en su mayoría de diálogo con ciertos sectores de la sociedad que se vieron afectados por la pandemia y las restricciones, el funcionario remarcó que el festejo «estuvo mal».
Asimismo, cargó contra la oposición, aseverando que las acusaciones e intento de instaurar un juicio político son movidas electorales caracterizadas por un «oportunismo político»:
«Olivos funcionaba como centro de reuniones, pero eso fue un evento social que no debería haber ocurrido. Pero hay un oportunismo político, los que siempre se opusieron a las medidas de cuidado ahora se rasgan las vestiduras.»
Santiago Cafiero – Jefe de Gabinete de la Nación
En ese sentido, la polémica de la foto pone en vista una situación tanto interesante como alarmante: En el transcurso de la pandemia hubo actores del arco opositor que, efectivamente, estuvieron en contra de las medidas de aislamiento dictadas por el Ejecutivo Nacional, defendidas bajo las banderas de la libertad y otros conceptos más.
Pero también, del otro lado, se destaca el extraño manejo de ciertas situaciones internas del Gobierno durante los meses más duros del aislamiento, como en el caso de este cumpleaños. Es verdad que está mal que aquellos opositores hablen desde una perspectiva moralista siendo que en otras ocasiones llamaron a violar las medidas sanitarias, pero eso no justifica, bajo ninguna manera, la celebración de un cumpleaños en la Quinta Presidencial mientras millones de argentinos padecían los primeros meses de la pandemia.
