Julio es un mes ideal para diseñar y empezar los almácigos de la huerta orgánica que tanto deseamos para el verano.
En el hemisferio sur, los cultivos de invierno están en pleno apogeo.
Quienes sembraron de manera anticipada coles, brocolis, remolacha y hojas verdes están saboreando los primeros frutos.
Las arvejas y las habas lucen adorables flores que posteriormente se convertirán en frutos.
Continuando en la misma idea organizativa, julio es ideal para pensar los tomates, berenjenas y pimientos.
Durante este mes podemos empezar los almacigos de estos vegetales.
Mientras se desarrollan, los plantines pueden esperar al lado de una ventana luminosa o dentro de un invernadero.
Cuando hablamos de invernadero también nos referimos a una caja plástica transparente que permita el ingreso de luz.
En julio también podemos continuar con la sucesión de cultivos de invierno.
Es importante pensar en los tiempos que requiere cada vegetal para crecer y madurar.
El detalle no es menor ya que cultivos como el del tomate, maíz, berenjena, zapallos, requieren mucho espacio.
Además de la superficie disponible para sembrar, es recomendable abonar la tierra con humus de lombriz o compost.
Si desea conocer la forma en elaborar tu propio compost con lo que desechas en casa, mirá la nota que compartimos a continuación.