Las médicas forenses que realizaron la autopsia al cuerpo de Cecilia Basaldúa prestaron declaración este martes.
En el segundo día de audiencia del juicio por el asesinato de Cecilia Basaldúa, las médicas forenses revelaron detalles de la autopsia.
De acuerdo a la declaración, el cuerpo de la joven no presentaba rastro alguno de mordeduras o ataques de alimañas.
Dicha información contradice la principal teoría que maneja la fiscalía de que el cuerpo permaneció 15 días bajo la intemperie.
Al reclamo de la abogada de la familia de la víctima se sumó el pedido de la Nación para esclarecer el caso.
Gerardo Battiston, abogado de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, manifestó que esperan que no “se condene a un inocente”.
Tanto la familia Basaldúa como Battiston entienden que existen serias irregularidades en el tratamiento del caso.
Ambas partes coinciden en que Lucas Bustos, el único acusado, es inocente y que el verdadero asesino está suelto.
Tanto en las declaraciones de los padres de la víctima como la de las forenses existe un punto de conexión.
Para los padres, la joven falleció en un lugar distinto al que fue encontrada, teoría que se sostiene tras la declaración forense.
Mientras continúa la rueda de declaraciones, la familia de la víctima espera la presentación de alguna prueba contundente.
Por el momento, ninguna de las pesquisas presentadas ubica a Bustos en la escena del crimen.
Quienes conocen del tema aseguran que es imposible que un cuerpo permanezca 15 días al aire libre sin ninguna marca.
De manera natural, los cuerpos inmóviles y en descomposición atraen a los depredadores de la zona.
Sin embargo, el cadáver de Basaldúa se encontró sin ningún indicio de la acción de la naturaleza mientras permaneció en el monte.
