Monotributistas

La Confederación General del Trabajo (CGT) ha intensificado sus reclamos al Gobierno nacional, demandando acciones inmediatas para prevenir el colapso financiero de las obras sociales sindicales. Esta situación crítica pone en riesgo el acceso a servicios de salud para aproximadamente 15 millones de personas en todo el país.

Causas del desfinanciamiento

Uno de los factores clave en el desfinanciamiento de las obras sociales es el Programa Médico Obligatorio (PMO), que establece las prestaciones mínimas que deben garantizar estas entidades. Según datos de la CGT, el costo promedio del PMO asciende a $45.000 por beneficiario al mes, incluyendo al grupo familiar. Este monto se reduce a $35.000 cuando se excluyen las prestaciones por discapacidad, financiadas por el Fondo Solidario de Redistribución (FSR).

Sin embargo, los aportes de ciertos sectores están lejos de cubrir estos costos. Mientras los trabajadores en relación de dependencia realizan aportes suficientes, los monotributistas contribuyen apenas $13.800 mensuales, los desempleados $14.000 y el personal doméstico $6.400. Esta brecha financiera agrava el déficit y coloca a las obras sociales sindicales en una posición de desventaja respecto a otros sistemas de salud.

Reclamos y propuestas de la CGT

En agosto pasado, la CGT presentó un informe al titular de la Superintendencia de Servicios de Salud, Gabriel Oriolo, con una serie de propuestas para frenar el colapso del sistema. Entre las medidas solicitadas se incluyen:

  • Sustituir el actual PMO por una canasta de servicios de emergencia.
  • Ajustar los aportes de monotributistas y personal doméstico.
  • Incrementar el reintegro del PAMI por las prestaciones brindadas por las obras sociales.
  • Transferir al Ministerio de Transporte y Educación los gastos relacionados con personas con discapacidad, actualmente solventados por el FSR.
  • Crear un fondo específico para financiar tecnologías de alto costo en salud.
  • Regular el aumento desmedido de medicamentos de alto valor.

Impacto en la salud de los trabajadores

Dirigentes de la CGT señalan que esta crisis se debe a un contexto de caída de los salarios reales y al aumento exponencial de los costos de prestaciones y medicamentos. Advierten que el sistema sindical de salud se encuentra en desventaja frente a otros esquemas y que las autoridades gubernamentales no han ofrecido soluciones consistentes.

«La salud accesible y de calidad para millones de trabajadores no parece ser una prioridad para los distintos gobiernos», expresó un dirigente sindical. Desde la central obrera, instan al Gobierno a tomar medidas urgentes para garantizar la equidad y el sostenimiento del sistema.

Puntos principales

Reemplazo del Programa Médico Obligatorio (PMO) por una Canasta de Servicios de Emergencia (CSE):

La CGT propone sustituir el actual PMO por una CSE, lo que implicaría una reducción en la cobertura de salud disponible para los afiliados, incluyendo a los monotributistas.


Incremento del 400% en el componente de Obra Social:

Se plantea aumentar en un 400% el aporte que los monotributistas realizan para la obra social, elevando este componente de aproximadamente $1.775 a más de $7.000 mensuales.

Asignación de monotributistas sociales a efectores públicos:

La CGT sugiere que los monotributistas sociales sean atendidos exclusivamente en hospitales y centros de salud públicos, lo que podría limitar sus opciones de atención médica.

Estas propuestas han generado preocupación entre los monotributistas, quienes consideran que tales medidas incrementarán su carga económica y reducirán su acceso a servicios de salud de calidad. Además, señalan que no han sido consultados ni representados en estas decisiones, lo que refuerza la percepción de inequidad y discriminación hacia su sector.

Es fundamental que las autoridades consideren las implicancias de estas medidas y promuevan un diálogo inclusivo que contemple las necesidades y realidades de todos los actores involucrados en el sistema de salud.

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