El ministro de Salud de Córdoba anticipó que en los próximos días se incrementará el número de internaciones y muertes por covid-19.
La advertencia se desprende de las estadísticas que arrojan tanto el número de contagios como el de ocupación de camas críticas.
Las cifras alcanzadas en ambos rubros hasta el momento son alarmante y anticipan la llegada de un pico que nadie desea.
En la actualidad hay cerca de 3.000 personas internadas por coronavirus y 600 de ellas se encuentran intubadas.
Por desgracia, muchos de los pacientes que integran las estadísticas terminarán falleciendo, explicó Cardozo.
También se observa una tendencia de infecciones y muertes en personas cada vez más jóvenes.
Respecto a la primera ola, la segunda parece ser no solamente más rápida sino la que se lleva más vidas.
Otro dato que llama la atención es el incremento de contagios en las personas jóvenes. Por las características propias del cuerpo, los jóvenes permanecen mayor tiempo internados.
Al margen de los anuncios, la realidad indica que existe una realidad que una parte de la población se niega a aceptar.
Por un lado se observa a quienes realizan fiestas clandestinas masivas o quienes no acatan ningún tipo de restricción.
Mientras que por el otro se encuentra un sistema de salud que no puede sostener el ritmo de semejante demanda.
Los médicos, enfermeras y personal de primera línea en la lucha contra el virus están agotados.
Por todos lados escuchamos testimonios de falta de consideración a quienes están al frente de batalla para protegernos.
Estamos por entrar al peor momento de la pandemia sin que exista un entendimiento social sobre el peligro que enfrentamos.