Esta mañana, surgió una importante polémica (o más bien, escándalo), tras el ingreso de oficiales de la Policía de Seguridad Aeroportuaria ingresaran al local de la Unión Cívica Radical en pleno centro de la ciudad.
El allanamiento, por orden del Juzgado Federal n°2 de Córdoba, surge en medio de la investigación sobre la colaboración de oficiales del Ejército en un acto partidario de Luis Juez por el 1° de mayo.
La orden en cuestión fue dada por el juez federal Miguel Hugo Vaca Narvaja, quien investiga la participación de miembros del Tercer Cuerpo del Ejército, quienes dieron apoyo logístico al senador de Juntos por el Cambio.
Cabe destacar que dicha actividad no contaba con ningún tipo de autorización por parte del Ejército, el cual a su vez no puede ofrecer servicios a terceros.
La presencia de miembros del Ejército en un acto partidario, sea de cualquier color político, representa no solo una gravedad institucional enorme, sino que recuerda a tiempos particularmente oscuros de la historia del país, cuando las fuerzas armadas se mezclaron con la política.
El radicalismo desvía la discusión
Tras el ingreso de los uniformados a la sede de Bulevar San Juan, el partido emitió un comunicado repudiando el allanamiento y remarcando que se trataba de una cuestión meramente política, incluso tildándolo de «persecución política».
En su gacetilla, aseveraron que el abogado querellante en la causa, Rafael Ortíz, está vinculado a Carlos Zannini. Asimismo, también mencionaron que el juez Vaca Narvaja es también cercano a la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En el comunicado, arremetieron contra el Frente de Todos, y contra el binomio presidencial:
«Son ellos [Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner] quienes deben dar explicaciones en la Justicia por los hechos de corrupción perpetrados durante sus cuatro gobiernos y, más importante aún, darle alguna certeza a la ciudadanía, que sufre cada vez más la angustia de estar en un país sin rumbo.»
Extracto del comunicado de la Unión Cívica Radical
Si bien en el comunicado también se explicita que el acto partidario fue del Frente Cívico y que escapa a la órbita de la UCR, cabe destacar que en el mismo estuvieron invitadas figuras ligadas al radicalismo.
También, si bien el radicalismo está totalmente en su derecho de denunciar persecuciones (quizás haciendo caso omiso a la historia del país), el partido no da cuenta de la gravedad detrás de que otro partido -miembro de la misma coalición política- haya organizado un acto junto al Ejército.
Pareciera que el «partido de la democracia» hubiera olvidado que la última vez que las fuerzas armadas y la política se mezclaron, desaparecieron 30.400 personas.
