A dos meses de su desaparición, un perro localizó el rastro de Guadalupe Lucero, la menor desaparecida en San Luis.
Un perro logró ubicar sobre la ruta 7 el último rastro que se tiene hasta el momento de Guadalupe Lucero.
En la búsqueda de Guadalupe, todas las miradas se dirigen ahora hacia la ruta que conduce a Mendoza.
De acuerdo a las últimas investigaciones la menor habría desaparecido del barrio en donde jugaba y habría sido colocada en un vehículo.
Esa es la principal hipótesis que por el momento manejan los investigadores del caso.
Conocida la nueva vista, la madre de Guadalupe, Yamila Cialone, expresó su pesar por los pocos avances en la causa.
«Ayer volví a vivir la desesperación que tuve el primer día que Guada desapareció… Llegué a la zona 0 a juntarme con Santiago… Llego al lugar y me encontré con esa noticia que a mí pequeña la sacaron por la ruta, desborde en llanto en impotencia, bronca, angustia porque era el primer dato del caso de Guada a dos meses….»
El hallazgo confirmado por la brigada canina revitaliza las pericias que se encontraban en un bache de incertidumbre.
Todos los rastrillajes realizados fueron negativos y la causa se encontraba en una zona gris.
La técnica que utilizó la brigada canina es la denominada de odorología forense. Dicha técnica consiste en tomar una muestra del olor de la persona desaparecida y entrenar a los perros para que sigan el rastro.
En primera instancia, los perros fueron llevados a la casa de Guadalupe y posteriormente al lugar en donde fue vista por ultima vez. En ese último lugar, los canes realizaron la primera marcación.
Con esa pista, los perros siguieron el olor en dirección norte donde los perros localizaron un objeto que se presume sería de Guadalupe. Con las pruebas de ADN se espera que se confirme la presunción.
Posteriormente, el rastro condujo a los investigadores hacia un descampado y terminó sobre la ruta 7. En ese punto, el perro perdió el olor de la pequeña por lo que se cree que la subieron a un vehículo.
