La Convención Constitucional que redactará la nueva Carta Magna de Chile se instaló de manera oficial este fin de semana.
A partir de ahora, Chile inicia un capítulo nuevo en la historia con la redacción de una nueva Constitución.
Los resabios de la última dictadura de Pinochet serán analizados en los próximos tres meses.
De manera emblemática, Elisa Loncón, una académica de origen mapuche, preside la convención.
Junto a ella, 155 delegados trabajaran en la construcción de una nueva Carta Magna para Chile.
Se trata de un proceso abierto que pretende completar la transición democrática del país.
También se impulsa una reforma del sistema neoliberal asfixiante que arrastra desde la llegada de Pinochet al poder.
Por último, pero no menos importante, la consigna es terminar con los rezagos del pinochetismo.
La tarea que se emprende en Chile hoy no es para nada fácil. El relamo social continúa latente en las calles.
El monstruo de Chile trascendió los festivales para tomar las calles y reclamar lo que le quitaron.
Otro de los desafíos es la aceptación y reconocimiento de la herencia cultural mapuche.
Convertir a Chile en un Estado plurinacional será una pelea que la derecha no está dispuesta a perder.
En la inauguración de la convención, un grupo de manifestantes intentó ingresar al recinto por lo que hubo demoras.
Tras constatar el cese de la represión, los convencionales dieron inicio a la sesión.
