Ojos

Existen serias razones por las que no deberías frotarte los ojos de manera constante y compulsiva. Mirá la nota.

Frotarse los ojos es un mal hábito que tenemos los seres humanos de todo el mundo.

Es un mal de la modernidad que puede causar severos daños a la vista.

Las causas por las que nos frotamos son varias y entre las más comunes se encuentran:

  • Alergia
  • Sequedad ocular
  • Cansancio de la vista
  • Picor
  • Presencia de un cuerpo extraño en el ojo

Independientemente de la causa, es importante saber que los ojos NUNCA deben frotarse.

Sabiendo lo anterior, existen personas que se frotan los ojos todos los días y a toda hora.

Esta compulsión puede producir el acortamiento de la longitud del ojo y el posterior desprendimiento de retina.

En el caso de las persona con glaucoma, frotar el ojo puede aumentar la presión ocular.

Frotarse de manera continua los ojos facilita la predisposición a formar queratocono en menores de edad.

El queratocono es una alteración en la cornea del ojo que produce distorsión en las imágenes.

Como siempre, la recomendación para quienes padecen algún tipo de afección física, la consulta al médico es la alternativa.