Las vacaciones de julio están a la vuelta de la esquina mientras crece la incertidumbre en el sector turístico de Córdoba.
Bajo un panorama incierto, las vacaciones de julio se aproximan con el pasar de los días.
En épocas pasadas, para esta fecha se observaba un movimiento distinto que anticipaba las vacaciones invernales.
Después de la pandemia, las actividades de todos los seres humanos cambiaron en el mundo.
Argentina no es la excepción y en ciudades que viven del turismo se escucha un lamento generalizado.
El sector turístico es quizá el que más sufre con las restricciones impuestas por la pandemia.
Esta situación se aprecia en Córdoba, una de la ciudades de mayor afluencia turística en el país.
Salvo decisiones aisladas de algunos jefes comunales que se animan a poner fecha a la temporada turística, el resto se mantiene expectante.
El Gobierno de Córdoba no ha definido aún las restricciones que regirán en julio ni tampoco el destino de las vacaciones.
Además, la circulación interdepertamental se encuentra aún prohibida hasta el 2 de julio-
Desde el Panal adelantaron que las decisiones dependerán de la evolución de la pandemia y de la campaña de vacunación.
De manera paralela, la Agencia Córdoba Turismo prepara un paquete de promoción turística distinto.
La idea es fortalecer opciones alternativas a los vacacionistas como el ecoturismo y de aventura.
En definitiva, resolver el dilema entre preservar vidas y hacer girar la rueda de la economía es la clave.