Finlandia

Tras una reñida elección, la derecha venció a Sanna Mirella Marin, la candidata del partido socialdemocrata de Finlandia.

Por estrecho margen, el conservador Petteri Orpo se llevó el treiunfo en las elecciones finlandesas de este fin de semana.

Sanna Mirella Marin, la actual primera ministra de ese país, perdió la oportunidad de renovar su mandato.

Petteri Orpo obtuvo el 20,8% de los votos que le aseguran 48 de los 200 escaños del Parlamento.

La gran sorpresa la dio la ultraderecha que cosechó 46 escaños, tres más que el actual oficialismo.

Tras el triunfo, Orpo hizo un llamado a la unidad y la necesaria reconstrucción de la economía.

«Creo que el pueblo finlandés quiere un cambio. Quiere un cambio y ahora voy a iniciar negociaciones, negociaciones abiertas, con todos los partidos. Y tengo una cuestión crucial, la economía. Tenemos que arreglar nuestra economía. Tenemos que hacer reformas que impulsen nuestra economía».

El análisis de la jornada electoral abre un panorama que plantea desafíos pero también algunas certezas.

Entre la ultraderecha y los conservadores, queda claro el rumbo que tomará el país en el próximo período gubernamental.

Mientras la grieta entre la derecha y la izquierda divide a los ciudadanos, el problema de la economía sale a relucir.

Los próximos años serán una buena oportunidad para que la izquierda recupere la credibilidad que perdió.

A Sanna Marin la sacudieron una serie de escándalos que minaron fuertemente al partido.

En las redes sociales se viralizaron imágenes de la primera ministra de fiesta con sus amistades.

También tuvo que soportar comentarios misóginos organizados en las redes sociales y una sospecha por consumo de drogas.

Por todas las acusaciones, Marin tuvo que brindar explicaciones y disculpas a los ciudadanos.