guerra

Los drones se convirtieron en el punto clave de las nuevas estrategias bélicas dentro del conflicto entre Ucrania y Rusia.

En los últimos días, la contraofensiva ucraniana incrementó el uso de aparatos manipulados a control remoto.

Con drones marinos, Ucrania intenta cambiar el rumbo de la guerra contra el ejército rojo.

Por segunda vez consecutiva, las embarcaciones rusas sufrieron el ataque del nuevo sistema de seguridad ucraniana.

Desde que empezó el conflicto, esta es la primera vez que Kiev puede presumir que está un paso adelante.

Ahora que la guerra se trasladó al mar, el uso de drones inclinó la balanza hacia el gobierno de Zelenski.

De acuerdo a los informes publicados por los rusos, Ucrania atacó al menos en 10 ocasiones a la flota militar contraria.

Los hechos ocurren sobre las aguas del Mar Negro y los analistas aseguran que se trata de un hecho que puede cambiar el rumbo de la batalla.

El punto diferenciador de la nueva etapa se concentra en el uso de los drones, aparatos livianos que aportan distintas ventajas.

Aunque Rusia cuenta con un importante historial en el uso de estos artefactos, la delantera en el mar la lidera Ucrania.

De acuerdo a informaciones recientes, los drones navales son díficiles de ubicar y son altamente efectivos.

Pese a su escaso tamaño, son capaces de trasladar explosivos letales y cámaras que guían el camino hasta el objetivo.

Los cálculos estimados sobre el costo de cada nave marina que utiliza Ucrania asciende a US$250.000

Por los ataques con drones, Rusia promete castigar a quienes resulten responsables.